MI VIDA
El universo te pone en el lugar donde tienes que estar. Al principio odiaba las clases de piano, me enamoré de una guitarra, sentí la necesidad de cantar y un reality me hizo darme cuenta que tenía que retomar mi camino. Todo esto tuvo que pasar para que hoy conozcas mi Esencia. Descubre más sobre mí dando clic en las estrellas de la guitarra o bajando con scroll en la página.
Soy hijo de Donma y Yoyi, como les digo yo. Hermano de David y Mike.
NEGADO PAL PIANO
“Saquen a ese niño de clases que él no quiere aprender”, así le dijo mi profesor de piano a mis papás después de varios intentos fallidos de tratar de enseñarme a tocar ese instrumento. Resulta que soy el tercer, y último hijo, de Donma y Yoyi. Ellos habían visto como mis dos hermanos, Mike y David, desde muy pequeños empezaron a tocar guitarra y piano. En vista de eso, decidieron inscribirme también a clases para que agarrara la disciplina que se fortalece con el arte. El problema es que yo siempre he sido muy inquieto.
A David siempre le iba bien con ese profesor porque él era muy juicioso y hacía todas las tareas. En cambio, a mí se me olvidaba todo de una semana a la otra porque prefería no practicar y dedicarme a jugar o hacer otras cosas. Después de la sentencia del profesor, y mi respectivo exilio de sus clases, mi mamá me dijo “hasta que no le dé la gana de aprender a tocar un instrumento, por su propia cuenta, no lo volvemos a meter a clases de nada en música”. Y yo la verdad no quería. Los encuentros con la música seguían siendo, como de costumbre, en la pieza de mi hermano mayor, Mike. Allí los tres nos parchábamos a escuchar las preferencias musicales del que ha sido guía, en ese aspecto y muchos otros, para David y para mí. Yo seguí de recocha, esperando todos los días volver del colegio para jugar fútbol con mis amigos. Había dejado de lado totalmente la música, a pesar que tanto me gustaba.
Además, por esos días y con unos 7 años, me tuvieron que hacer una cirugía porque yo era el propio ronco, así qué cantar cero. Tanto así que mi mamá y mi papá, ambos son médicos, estaban muy preocupados porque sabían que, con el tiempo, eso iba a empeorar e iba a afectar mi vida cotidiana. Diciendo adiós a las amígdalas y con unos arreglos en las cuerdas vocales lo ronco se fue de un día para otro.
PANDORA
Mike tenía una banda de rock y una pareja que le regaló una guitarra hermosa. Cuando entré a mi cuarto, un día después del colegio, encontré a Pandora en mi cama. Fue la primera guitarra que él había tenido y decidió dármela. Ella causó algo en mí y de una empecé a ver tutoriales en YouTube para aprender a tocarla, pasé hasta por vídeos de un portugués al que no le entendía nada, pero enseñaba a poner los deditos tal y como era. La primera canción que toqué fue Wonderwall de Oasis porque me gustaba mucho y le había escuchado a Mike que era muy fácil de tocar. Decidí someterme a la prueba de fuego y llevar la guitarra a una reunión familiar para tocar 4 o 5 canciones que ya me sabía. Antes de eso, nadie se daba cuenta que yo estaba aprendiendo porque siempre que llegaba a mi casa del colegio estaba solo o con David, pero él salía a jugar o a hacer otras cosas. Cuando me vieron llegar con el instrumento, al encuentro familiar, me dijeron que para qué lo llevaba si no sabía tocar, ¡No sabían la sorpresa! Cuando empecé a hacer el show con la guitarra todo el mundo empezó a cantar las canciones y a mí me gustó mucho esa experiencia, yo no me atreví a cantar por lo ronco que era antes. Mis papás al verme motivado me metieron a una academia para mejorar la técnica con el instrumento y allí tuve una banda de rock que se llamaba The Jokers, con 12 años empecé a ir a toques. Sin embargo, el grupo tenía un problema: éramos muchos, pero solo cantaba la vocalista. Entre todos los que habíamos no había nadie que hiciera los coros. Ahí dije ¿Por qué no? y se me ocurrió una idea.
YO, INFLUENCER
Yo disfrutaba mucho tocar la guitarra y que la gente empezara a cantar, pero yo quería cantar con ellos. Adicional a esto, teníamos la necesidad de tener coristas en la banda. Se me metió a la cabeza que tenía que aprender a cantar, pero tenía el problema de que nunca antes me había atrevido por el problema que había tenido antes con mi voz. Yo dije, “no parce, me voy a encerrar en mi pieza con música a todo volumen, para que nadie me escuche cantar y ver qué sale”. Empecé a practicar los coros de las canciones y vi que era hasta afinado, ponía otras y trataba de cantarlas conscientemente. Y lo mismo, las reuniones familiares eran la prueba final. Me fui a cantar y todos me motivaron full, quedaron muy contentos con mi voz. Mike ya estaba en otra banda, Victoria, que era de ritmos más juveniles y cuando me escuchó me planteó la idea de subir contenido a YouTube para que la gente me fuera conociendo.
Mi primer cover en YouTube
Me dijo que como no iba a subir vídeos cantando cada semana, porque apenas estaba aprendiendo, los mezclara con contenido divertido como el que hacían los influencers que estaban pegando. Con 15 años abrí mi canal y el primer vídeo que hice fue el reto de la canela, con la novia de David, y después apareció el primer cover. Fue Tabaco y Chanel de Bacilos, grabado en el ascensor de mi unidad. La canción tuvo una buena acogida y varias de las seguidoras de Mike empezaron a seguirme a mí, me pedían más contenido y así empezó oficialmente el yo, influencer. Me la pasé varios años haciendo contenido tipo influencer, con amigos como Santi Castaño, y subiendo covers a mi canal para no perder mi esencia.
Mi etapa YouTuber me dejo recuerdos y amigos
LA VOZ TEENS
Dos días antes de cerrarse las inscripciones para La Voz Teens de Caracol, en 2016, un amigo de Mike me dijo “Eh y, ¿Vos nunca has considerado presentarte a ese programa? La verdad no lo había pensado porque no tenía técnica y veía que esa gente cantaba mucho. Pero Camilo ya había sembrado la duda en mí, no tenía nada que perder y ese mismo día hice el vídeo y lo mandé. Hasta hoy, ese cover de Me llamas de Piso 21 sigue siendo una de las producciones favoritas de mi canal. “Simón levántese que lo están llamando. -Ma, está muy temprano déjame dormir. – Dicen que son de Caracol y yo no sé para qué sea”, ahí me paré como un resorte.
El vídeo lo había subido la noche anterior, ya tenía cerca de 10 mil reproducciones, y en menos de 12 horas me llamaron a decirme que querían que yo siguiera en el proceso. Desde ese día empezó un camino muy largo entre filtros, entrevistas y pruebas hasta llegar a Bogotá. Todo esto, al mismo tiempo que cursaba el tercer semestre de Comunicación Social en Eafit. Cuando llegué a la audición a ciegas canté Carnaval de Maluma y mi corazón se detuvo por un segundo cuando Andrés Cepeda giró para incluirme en su equipo.
Llegué en el concurso hasta la etapa de las batallas y hoy puedo decir que ha sido una de las mejores experiencias de mi vida. Allí conocí a un montón de personas de la industria musical y a una cantidad enorme de pelaos de todo el país que estaban haciendo los mismo que yo, creer en este sueño que nos desvela con letras y acordes. Pasé en un día de tener 700 seguidores a 7.000 y claro, llegué de allá muy motivado y montado en la película de querer hacer música toda mi vida, pero ¿y el lado influencer? Ahí empecé a cuestionarme.
ESCOGER UN LAO’
No me podía quejar, me estaba yendo muy bien en mi rol como influencer. Tenía un proyecto al que llamamos Los Dobles con Santi Castaño y se nos estaban abriendo puertas en shows y escenarios interesantes. Sin embargo, en todos esos lugares yo estaba con la guitarra, por esos días empecé a componer mis propias canciones y la duda crecía en mí, me preguntaba si debería parar alguna de las dos cosas.
Tenía claro que no iba ser un influencer queriendo ser músico o un músico queriendo ser influencer. No estaba dando mi 100% en ninguno de los dos lados y decidí hablarlo con mi familia y amigos. Recibí muchas opiniones y la mayoría decía qué me veían más como artista, incluido Santi a quien no le convenía que abandonara mi lado de influencer y aun así reconoció en mí la vena musical. Decidí seguir mi corazón y hacer lo que más me había gustado desde chiquito: música.
Desde ahí me empecé a tomar todo un poquito más a pecho y a componer todos los días. Dejé de subir contenido a redes un tiempo, para hacer el tránsito de una cosa a la otra, y en ese lapso conocí a JP Roldán, productor musical, y a Eco, compositor, con quienes empecé a hacer canciones.
Y entonces marcó el inicio de mi carrera.
La primera que grabé no fue la primera que lancé, me tomé tiempo en encontrar mi sonido como artista. El primer sencillo que decidimos sacar fue “Y entonces”, qué lo enlazamos a un proyecto de la universidad para hacer el videoclip que quisimos contara una historia. El 15 de noviembre de 2018, justo el día que cumplí 20 años, lanzamos la canción y mi carrera como artista. “Y entonces” fue la pista final que me dijo que yo definitivamente me quería dedicar toda la vida a la música.
PA’ LANTE
La práctica profesional, por decisión y curiosidades de la vida la hice en 84 Lab, un estudio musical. Llegué como comunicador y me quedé como compositor. Literal me fui buscando plata y encontré oro. Es el momento en que más apoyo he recibido y que más personas se han sumado a mi proyecto. Allí se me dio la oportunidad de empezar a grabar mis canciones y desde mucho antes yo sabía que mi primer álbum iba a ser Esencia.
Elegí ese título porque será mi carta de presentación ante el mundo. En este EP estará plasmado lo que soy como vocalista, compositor y persona. Es una mezcla de ritmos y letras que dicen que no soy blanco ni negro, sino que me muevo entre grises y colores. En el proceso de creación de los videoclips, nos dimos cuenta con el equipo de la universidad que me acompaña en este momento, que al elegir unas canciones en un orden específico, podíamos contar una sola historia que une a todo el EP.
Es un relato que se basa en mis propias vivencias, con mis amores y desamores, situaciones que me han formado como artista y persona. Hay cosas en la vida que uno no entiende. Por ejemplo, por qué no me gustó el piano en mi infancia y después me enamoré de la guitarra, por qué cuando estaba en la etapa de influenciador la música me dijo venga pa’ acá, cómo es que la academia también se ha involucrado en este proyecto, por qué tuve que tomar algunas decisiones que me han traído hasta este punto… pero yo creo que todo eso pasó porque es el camino tenía que seguir.
No todo ha sido fácil pero la clave ha sido continuar trabajando, persistir, seguir montado en la película, creérsela más que nadie porque la vida te va llevando a donde tienes que estar. Gracias a Dios, mi familia, mis amigos y a todas las personas que se ha ido sumando hoy puedo decir que estoy cumpliendo mi sueño. O al menos, la primera parte porque con tu ayuda, seguiremos haciendo música y llegaremos a ser mundiales.